Cargar a tu bebé correctamente en un rebozo fular ¡mami cárgame!® es más seguro que solo cargarlo en tus brazos.
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• Al cargar al bebé por primera vez, hazlo en un lugar tranquilo, que el bebé esté relajado y contento ó un poco adormilado y no tenga hambre.
• No te desilusiones si tu bebé llora mucho porque no está acostumbrado. Trata de relajarte, abrázalo, háblale e inténtalo de nuevo manteniéndote en movimiento.
• Usa tu sentido común, no impongas a tu bebé a una posición en específico.
• Practica constantemente las diversas formas de cargar a tu bebé, las primeras veces frente a un espejo.
• Asegúrate de que tu bebé no tenga obstáculos para respirar.
• Nunca lleves a tu bebé al andar en moto, bicicleta ó caballo.
• Si vas a manejar, ponte el rebozo desde tu casa sin anudar atrás, así evitarás ensuciarlo con el piso de la calle, para posteriormente cuando te bajes del auto, acomodes a tu bebé en el rebozo.
• No es sustituto del asiento para bebés dentro de un vehículo.
• Pisa correctamente las escaleras y utiliza los barandales.
• No uses tacones cuando cargues a tu bebé.
• Ten cuidado con la cabeza y cuerpo del bebé al doblar esquinas o pasar por puertas.
• Al agacharte cuando estés cargando al bebé, dobla las rodillas y no la cintura.
• Si alguien más te ayuda a cuidar a tu bebé, enséñale a usar el rebozo.
• El rebozo ¡mami cárgame!® debe ser utilizado como lo indican las instrucciones.
• Con las instrucciones adecuadas y una buena técnica ¡disfruta a tu bebé siempre!
Posición de las piernas
La forma correcta es de ranita o en forma de “M”. Conservando las piernas de tu bebé flexionadas con un ángulo de 90º. Sus rodillas y las puntas de los pies girando hacia afuera de su centro de gravedad.
Altura correcta
Si el anudado quedó muy suelto, tu bebé se irá “colgando”, corriendo el riesgo de lastimarlo y lesionar tu espalda por el esfuerzo lumbar, además de ser incómodo. Por el contrario, si colocas a tu bebé muy arriba, te obstaculizará la visibilidad.
La altura ideal es sobre tu pecho, al alcance de un beso tuyo en su frente o su carita. No olvides revisar que la espalda de tu bebé se redondeada, no arqueada.
Cuida su cabeza
Si tu bebé aún no sostiene por si solo su cabeza, o está dormido dentro del rebozo, estabilízala girándola solo en el eje de su columna vertebral. Las bandas diagonales del rebozo fular te sirven para hacerlo.
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